El síndrome de Cushing es una condición poco frecuente, pero puede tener un impacto significativo en la salud general de quien lo padece. Se produce por un exceso de cortisol, una hormona que regula múltiples funciones del cuerpo, como el metabolismo, el sistema inmunológico y la respuesta al estrés.
Aunque es una enfermedad poco común, su detección temprana es clave para evitar complicaciones graves. Y para esto es necesario conocer sus principales causas, cómo identificar sus síntomas, cuándo consultar a un especialista para conocer sobre el tratamiento más adecuado.
¿Qué causa el síndrome de Cushing?
El síndrome de Cushing puede originarse por varias razones, tanto endógenas como exógenas:
- Causas endógenas: En la mayoría de los casos, el exceso de cortisol se debe a un tumor hipofisario benigno (enfermedad de Cushing), que estimula la producción de la hormona adrenocorticotropa (ACTH). También puede deberse a tumores en las glándulas suprarrenales o, más raramente, a tumores ectópicos que generan ACTH.
- Causas exógenas: El uso prolongado de medicamentos corticosteroides (como la prednisona) para tratar enfermedades inflamatorias o autoinmunes puede inducir un síndrome de Cushing iatrogénico.
Identificar la causa es fundamental, ya que el tratamiento varía dependiendo del origen del exceso de cortisol.
Síntomas más comunes del síndrome de Cushing
Esta enfermedad puede desarrollarse de manera lenta, lo que hace que los síntomas pasen desapercibidos o se atribuyan a otras condiciones. Estos son los signos más frecuentes que usted debe tener en cuenta:
- Aumento de peso, especialmente en el rostro (cara redonda o “de luna llena”), abdomen y parte superior de la espalda.
- Debilidad muscular, especialmente en brazos y piernas.
- Estrías violáceas en el abdomen, muslos o mamas.
- Presión arterial alta y glucosa elevada en sangre (diabetes secundaria).
- Fragilidad de la piel, moretones frecuentes e infecciones recurrentes.
- Cambios en el estado de ánimo: ansiedad, depresión o irritabilidad.
- En mujeres: alteraciones menstruales, crecimiento de vello facial o corporal.
- En hombres: disminución de la libido y disfunción eréctil.
Si usted presenta varios de estos síntomas de manera persistente, es recomendable consultas con un neurocirujano especializado, sobre todo si hay sospecha de un tumor hipofisario como causa subyacente.
Diagnóstico y opciones de tratamiento en Costa Rica
En Costa Rica, el diagnóstico del síndrome de Cushing requiere un abordaje integral que incluye estudios hormonales, pruebas de laboratorio (como la medición del cortisol en orina de 24 horas o saliva nocturna), estudios de imagen (resonancia magnética o tomografía) y una evaluación médica especializada.
El tratamiento dependerá del origen del síndrome:
- Tratamiento farmacológico: En casos leves o cuando la cirugía no es posible, se pueden utilizar medicamentos que bloquean la producción de cortisol.
- Cirugía: Si la causa es un tumor en la hipófisis o en las glándulas suprarrenales, la cirugía transesfenoidal o la resección adrenal son opciones efectivas y disponibles en centros especializados del país.
- Radioterapia o terapia de reemplazo hormonal: Se puede considerar en casos en los que no se logra una remisión completa con cirugía.
Contar con un equipo médico con experiencia en el manejo de tumores hipofisarios y trastornos hormonales es clave para lograr un diagnóstico preciso y un tratamiento exitoso. En Costa Rica, existen especialistas en neurocirugía y endocrinología con formación avanzada que ofrecen un abordaje integral y personalizado.
¿Sospecha de síndrome de Cushing o ya tiene un diagnóstico? Agende una cita con nosotros para evaluar cual es el mejor tratamiento para usted. Un diagnóstico temprano puede marcar la diferencia en su calidad de vida.